Desván Para Pensar
Si hay algo que le encanta decir a la gente sobre sí misma es "Yo siempre digo las cosas de frente". Yo seré totalmente honesto: jamás he dicho tal frase. La razón es muy sencilla, ese "siempre" metido ahí al principio de la frase es un compromiso que por mi condición de ser humano ya no puedo asumir. Pero gran parte del resto del mundo parece no tenerle asco a la frase, lo que es peor lo convierten en su más preciada y destacada virtud. La pregunta es ¿de verdad se puede afirmar tal paradoja? No conozco a persona que en alguna circunstancia no sea buena para hablar y reír a espaldas de otro. Conozco ha muchos que se hacen los valientes en ausencia de otro lanzando amenazas al estilo "se lo voy a decir no más, no me importa lo que diga" y una vez al frente de la persona mencionada tirita la voluntad y hasta termina subyugado a la imponente presencia del otro.
Digamos la cosas como son, así como versa cierta publicidad, "nadie dice siempre las cosas de frente". Con este fenómeno de los realities en televisión hemos visto a participantes que se lanzan la famosa frase autorreferente y al segundo después descueran al ausente con cuanta descalificación puedan vociferar cayendo entonces en el ridículo más patético y contradictorio posible. Tal cual es en la vida diaria, cada vez que alguien se vanagloria de decir las cosas siempre de frente cae en ese mismo patetismo. ¡Y vaya, cómo le gusta a la gente mencionar esa frase describiéndose a sí mismos! Amigo lector, si alguna vez dijiste esa frase sobre ti mismo, piénsalo una vez, recuerda la cantidad de veces en que ese "siempre" ha sido vapuleado porque te aseguro que con suerte se convierte en un mezquino "ocasionalmente".
Si hay algo que le encanta decir a la gente sobre sí misma es "Yo siempre digo las cosas de frente". Yo seré totalmente honesto: jamás he dicho tal frase. La razón es muy sencilla, ese "siempre" metido ahí al principio de la frase es un compromiso que por mi condición de ser humano ya no puedo asumir. Pero gran parte del resto del mundo parece no tenerle asco a la frase, lo que es peor lo convierten en su más preciada y destacada virtud. La pregunta es ¿de verdad se puede afirmar tal paradoja? No conozco a persona que en alguna circunstancia no sea buena para hablar y reír a espaldas de otro. Conozco ha muchos que se hacen los valientes en ausencia de otro lanzando amenazas al estilo "se lo voy a decir no más, no me importa lo que diga" y una vez al frente de la persona mencionada tirita la voluntad y hasta termina subyugado a la imponente presencia del otro.
Digamos la cosas como son, así como versa cierta publicidad, "nadie dice siempre las cosas de frente". Con este fenómeno de los realities en televisión hemos visto a participantes que se lanzan la famosa frase autorreferente y al segundo después descueran al ausente con cuanta descalificación puedan vociferar cayendo entonces en el ridículo más patético y contradictorio posible. Tal cual es en la vida diaria, cada vez que alguien se vanagloria de decir las cosas siempre de frente cae en ese mismo patetismo. ¡Y vaya, cómo le gusta a la gente mencionar esa frase describiéndose a sí mismos! Amigo lector, si alguna vez dijiste esa frase sobre ti mismo, piénsalo una vez, recuerda la cantidad de veces en que ese "siempre" ha sido vapuleado porque te aseguro que con suerte se convierte en un mezquino "ocasionalmente".
1 comentario:
Yo nunk me reído a espaldas de otros jajajaja, pero en todo caso si calculas las cantidades de veces que nos hemos reído en la cara, pero realmente cara de alguien podríamos decir que tenemos un saldo a favor (demasiado a favor tal vez) en la "sinceridad", aunque nos hemos reido harto a espaldas de muchos... en general nos hemos reído demasiado de los demás en sus caras o espaldas xD.
Pero aún si a eso sumo todas las veces que se me ha salido exactamente lo que estaba pensando ie: "esa es la wea mas patética que he oído en mi vida" aún asi ni cagando podría decir "siempre digo las cosas de frente" ni con cueva ocasionalmente y si lo llegara a decir es puro toyo xD.
Ag... digo saludos
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